OPINIÓN

JÓVENES OPTIMISTAS

Por Viviana Isasi (*)
17 de febrero de 2025.


Cambiaron las expectativas sobre los sub-35 en Argentina, y entre ellos mismos. Pasaron de ser el sector más pesimista sobre el largo plazo, a compartir el optimismo del resto de los segmentos de edad.


En nuestra encuesta de noviembre, el 51% de los argentinos cree que el 2025 será un mejor año económico que 2024, y como podemos ver en la tabla siguiente, casi no hay sesgo de edad: todos piensan más o menos igual.


Otro cambio notable que registró nuestra medición de noviembre (disponible en https://isasiburdman.com/mileiglobal) es el optimismo a largo plazo para la juventud. En el mes de julio, solo 23% de los argentinos recomendaba a un joven menor de 35 años que se quedara en el país; actualmente, el 37% lo hace.


Este cambio de perspectivas sobre uno de los segmentos electoralmente más determinantes (los sub-35 son el 40% del padrón), que ahora proyecta quedarse y sueña con vivir "en el país grande de sus abuelos", es notable ya que pocos meses atrás decían tener miedo sobre su proyección en el país porque veían "todo difícil" para progresar.


Las juventudes temían no poder mejorar su calidad de vida o no llegar a cumplir sus expectativas laborales y profesionales, pese a que la mayoría tiene más estudios que sus padres. Hoy, casi 2 de cada 5 argentinos considera que los sub35 deberían quedarse en el país porque "ahora podrán tener futuro".


Pasaron de ser la "generación del clima" a la "generación de la economía", justamente porque están más preocupados por darlo todo en una lucha individual (salvarse ellos) que por causas colectivas.


Este individualismo llegó a los jóvenes argentinos, al igual que a sus coetáneos alemanes, estadounidenses y latinoamericanos, con mensajes claros y directos: "tené confianza en vos", "defendé lo que pensas" y/o "jugátela por vos".


Identidad mileitrumpista


El 53% de los argentinos tiene imagen positiva de Javier Milei, 42% la tiene de Donald Trump, y 35% tiene imagen positiva de los dos. Estos son los mileitrumpistas. Y entre los jóvenes son más aún: 37%.


Los grupos libertarios argentinos, que en su versión más militante antagonizan con el "zurdo", "kirchnerista", "comunista" o "adoctrinado", ahora despliegan una identidad mileitrumpista. Además de las consignas de Milei en Argentina, los mileitrumpistas adhieren a los discursos anti-género, pro-familia tradicional, anti-guerra de Trump. Y también a sus críticas de la inmigración descontrolada.


Los discursos anti-género, críticos del feminismo y las posiciones antifamilia, son un blend que se gestó desde el Gobierno de Cristina y no fue capitalizado por el macrismo. Ese fue otro de los cambios de época que Mauricio Macri no vio, y por eso la comunidad avasallada de los varones jóvenes apoyó a Milei. Se trata del mismo fenómeno que se registró en los orígenes de muchos partidos de las nuevas derechas en Europa.


Otras de las características de los jóvenes libertarios es que dejaron de tener como referentes a sus padres, y admirar los liderazgos con perfiles fuertes e innovadores. Mediados por sociabilización digital, practican el culto a lo nuevo, con una adhesión fuerte a la figura de Elon Musk y los principales empresarios tecnológicos.


La Libertad Avanza quiere ser identificada como el partido de las redes, justamente porque la militancia en ellas representa una pertenencia a una comunidad política masiva. En "ese lugar común para expresarse sin prejuzgamientos" se informa cada vez más gente, que elige los temas de interés y sigue a las personas que les resultan carismáticas.


En esta herramienta está el refugio identitario de las juventudes mileitrumpistas, que viven este espacio de expresión como propio y magnifica sus mensajes. Para ellos, la militancia tradicional es para juventudes adoctrinadas y moderadas; en cambio, la nueva militancia contestaria está en las redes rebeldes y sin censura./


(*) Politóloga. Socia de Isasi / Burdman Consultores Políticos