Ganadores y perdedores

LOS textiles se quejan, los repartidores festejan 

La penetración de las aplicaciones chinas de compras online impacta negativamente en ciertas industrias, pero impulsa la actividad logística en todos los niveles.

Por: Redacción / 22 de septiembre de 2025


El consumidor argentino prefiere los productos de indumentaria asiática porque no convalida los precios de la industria textil local. El lamento de los industriales subsidiados y el aplauso de los consumidores y sobre todo, de los trabajadores de las aplicaciones que alcanzaron más de  400 mil entregas entre enero y mayo de 2025.

 

Las importaciones asiáticas y la modalidad de compra ecommerce generan impacto en el empleo que eligen sobre todo los jóvenes argentinos. Competencia en mercado puro, modelo Milei.   


Lo que sucede es que las ventas de los gigantes internacionales Shein y Temu impulsan el crecimiento de los envíos de los repartidores en Argentina y la empresa textil nacional no logra ser competitiva, ni en precios ni en oferta laboral. La importación los pone en una encrucijada;  tenes que competir, es decir o mejoras tus precios y reinventar tu cadena de costos o te quedas fuera del mercado. El gran lamento es la vieja costumbre a la indexación de la economía que convenía a los industriales y a las adminstraciones provinciales pero no a la mayoría de los trabajadores ni a los consumidores. Durante años se protegió a una industria que importaba al dólar oficial y vendía jeans a más de 100 mil pesos en Argentina.   


Muchos acusan a esta población activa de desindustrialismo pero estos repartidores no son Falabella que van a romper el mercado industrial con la importación, son mayoritariamente jóvenes de sectores populares, los  eternos perdedores del sistema porque en la mayoría de los casos no han tenido oportunidades reales ni dignas en el mercado laboral formal. Hoy esos pibes se apropian de lo que importan y le agregan valor agregado, están volviendo a la cultura del trabajo por sus propios medios. Es también un cambio cultural: tener bien claro que si no se salvan ellos no los salva nadie. Muchos pibes tienen consciencia de su realidad y se están reinventando a través del laburo, se están insertando al sistema.

 

Según la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI), 8 de cada 10 empresas sufrieron caída de ventas cercana al 30% en los últimos dos años. No hay un reseteo del sector ni capacidad de respuesta de los comercios que pagan alquileres, salarios, servicios.


En términos de empleo, los diversos subrubros de la indumentaria emplea a 539 mil personas. Sin embargo, no logra una reconversión ante los desafíos  del comercio mundial y el nuevo mercado laboral. La cadena textil este año solamente aumentó un 1% en promedio las ventas, a diferencias de las importaciones asiáticas que facturaron casi 94 millones de dólares en el último mes.


En contraparte, las empresas courier, especializadas en la entrega rápida y segura de paquetes y documentos, crecieron exponencialmente. Los envíos desde estas aplicaciones alcanzaron más de 400 mil entregas entre enero y mayo de 2025. Según esta tendencia, en este país no solo se prefiere consumir la indumentaria extranjera, también se elige cada vez más el sistema de autoempleo que te ofrecen las aplicaciones para completar un ingreso con flexibilidad horaria.  


A nivel nacional, el Gobierno ejecutó medidas para equilibrar la competencia y fomentar la reducción de precios locales. Según la Secretaría de Comercio, estas decisiones buscan acercar los precios argentinos a los de mercados limítrofes como Chile y Paraguay, que tradicionalmente tienen precios más bajos./